Quiero proponer un brindis…
Quiero proponer un brindis. Por Dios, que está en todas partes. En las calles y en las plazas. En las tabernas. En esta mesa, y en este vino. En las encrucijadas de los caminos y en las puertas de las ciudades. En las joyas de las mujeres hermosas y en las blasfemias de los hombres. En los campanarios, en los claustros, en los sermones de los curas y en las oraciones de los niños. Y en las fiestas de los viejos, en los testamentos, en las sentencias de los jueces y en el miedo. Y en las manos de los artistas, en el nacimiento y el abandono de los niños, entre las sábanas de los moribundos, en las camas de los hospitales, y en el patíbulo de los ajusticiados, en las súplicas de los pobres y en la caridad de los ricos. Y en el silencio de la noche, y en el sonido de las campanas y de los órganos. Y en los pechos de los putas. En el pecho de todas las putas del mundo, esas honradas señoritas. Hombres y mujeres. Todo se hace en su nombre y por su voluntad. Nada de lo humano le es ajeno, nada de lo divino le es extraño. Todo es dios. Así que no habléis mal de él. Puede enterarse. Serie «LA PESTE»
Reflexionando sobre la investigación paranormal
En muchas ocasiones tengo la oportunidad de hablar con personas interesadas en el mundo de la investigación paranormal y en investigar en lugares presuntamente encantados. De esas conversaciones me llama algo la atención: en muchos de ellos –no todos- la visión paranormal es la primera en ser contemplada cuando lo lógico es que sea la última en contemplarse.
La máxima de un investigador, o aspirante a ello, está en buscar la explicación a un caso, una explicación lógica y racional que tenga argumentos, razonamientos y “pruebas” para explicar lo que sucede en un determinado lugar aquejado de esa supuesta actividad paranormal.
El investigador debe ir en varias ocasiones al lugar, hacer un seguimiento que se puede alargar semanas o meses –hasta años- y tratar de captar el fenómeno para ser analizado. Captado por medios objetivos tales como cámaras de vídeo, grabadoras de audio, medidores profesionales y otros mecanismos que ayuden, dentro de una objetividad científica, a resolver el caso que se investiga (aparte de este apartado quedan aparatos como Spirit Box, Ovilus y demás). Controles de humedad, temperatura, posibilidad de incidencia de ultrasonidos e infrasonidos, sugestión, psicología, etc… Todo puede servir para desentrañar un caso allá donde la razón dice que el fenómeno paranormal debe ser el último en ponerse sobre el tapete para explicar un caso.
Otro punto importante es saber la diferencia entre aquellos casos que son testimoniales a aquellos que han sido investigados: los testimoniales son aquellos que por imposibilidad de investigar en un sitio determinado (por haber sido derribado, por no obtener los permisos o autorizaciones, etc…) se apoyan siempre en la documentación y testimonios que facilitan los testigos. Casos que siempre orbitan en torno al testigo y a la credibilidad de su testimonio, siendo cronistas de su particular realidad y siendo el investigador sujeto de ser engañado… o no. Casos muy importantes en la Historia de la Parapsicología se han mostrado de esta forma, otra cosa es que aquel que lea sepa diferenciar donde comienza la labor del cronista y acaba la labor del investigador.
En los casos investigados es vital poder realizar investigaciones en diferentes horarios y épocas para determinar la incidencia de temperaturas, horas, niveles y ruidos. Todo esto requiere de constancia y de tiempo así como poder hacer un exhaustivo seguimiento. Pero siempre teniendo en cuenta que si un testigo indica que vive “fenómenos extraños” por lo vivido hemos de ser nosotros los que dejemos en cuarentena esa valoración y se trate de investigar las causas que lo pudieran provocar, primero las normales y luego, cuando no hay argumentos, la inexplicable, siempre debe ser la última.
En muchas ocasiones los intereses hacen que se niegue un fenómeno cuando este es real y se está produciendo y, en otras, se afirme un fenómeno allá donde no ocurre nada, por ello debemos ser siempre objetivos y nunca dejarnos llevar por el presunto misterio sin una amplia investigación que determine lo que sucede sabiendo que todo puede tener una explicación. El fenómeno paranormal es atemporal, no tiene reloj, se puede manifestar a un investigador y a otro no, uno puede captar “algo” y otro no y no por no captar nada significa que allí no pasa nada, sólo que ese investigador esa noche no ha captado nada, no siendo suficiente para negar un fenómeno… Pero aquel que lo capta tampoco puede aventurarse desde primera hora a decir que ha captado lo paranormal. Es la única forma de dignificar el misterio y la investigación.
Jose Manuel García Bautista
No se de qué me sorprendo
Ayer hablaba con un buen amigo, de peso, mucho peso, muchísimo peso (con el que se empeñan algunos en decir que nos llevamos mal, ¡ay! si supieran…) en el mundo del misterio y me decía que en esta vida, que en este mundo, a muchos se les había ido la cabeza…
Hay personas que se mueven por la pasión o por la curiosidad cuando de lo extraño, de lo misterioso se trata. Apasionados del misterio que invierten su tiempo en investigar, viajar y aprender, divulgar o comprar un libro de estas temáticas y leerlo. Hay muchas formas de seguir o ser aficionado a un tema y todas respetables. Cada uno elige libremente aunque haya quién quiera manipular hasta esa libertad…
Donde coincido con mi amigo es que también hay polemizadores, «buscabollos» a los que que cualquier día les van a partir la cara más allá de un Juzgado, que lo único que pretenden es denostar la imagen del misterio o de los casos o de los investigadores/divulgadores que realmente trabajan. Es fácil criticar e inventar tras un teclado y que algunos adoctrinados lo crean, el problema es que, en muchos casos, ya nadie se preocupa de consultar a la otra parte su versión, contrastar ese motivo de crítica si es real o no, y de buena ganas se da por buena una versión que es una falacia, un bulo o una difamación. Es lo que tenemos. Se aplica aquello del «Intoxica que algo queda» y hay quien se deja intoxicar allá donde se ha atravesado la barrera del delito.
Quizás por un falso sentido de la amistad o por la gratitud a una falsa confidencia se cree a pies juntillas lo que el difamador piensa pero…¿Y si el difamador está engañando a aquellos que tiene cerca? Hay un problema de jugar con la verdad, de manipular a las personas y querer hacer frente y patria de causas tan perdidas como injustas.
Toda información tiene dos caras y el fruto de la objetividad es conocer ambos lados y hacer una idea de lo real en base a ellas, si no se confronta una de ellas la información es parcial y, en muchas ocasiones falsa o sesgada según los intereses.
Pero a esta sociedad nuestra, de egos, de celos, de envidias, de inventos, de ver mucho la televisión con programa vacíos donde el insulto y el rumor son la moneda de cambio, le hace falta parar, detenerse a pensar, ver quién es quién y comenzar a reemprender la marcha sabiendo que es más fácil vivir tras un teclado que «saltar a la arena» a batirse el cobre con la Vida por que, al fin y al cabo, unos viven la vida y otros viven «otra vida» donde las redes sociales lo abarcan todo y es el nido de los nuevos amigos, amigos de ida y vuelta o de horas, allá donde la amistad es un espejismo. Tenedlo en cuenta pues luego será demasiado tarde.
Jose Manuel García Bautista
Por y para el misterio
El mes de mayo, que pronto acaba, ha sido un mes muy duro, un mes en el que he dado siete conferencias -gratuitas y con el firme deseo de compartir el conocimiento-, he estado cinco días en la Feria del Libro firmando o presentando mis obras conviviendo y saludando a muchas personas que, de corazón se acercan a saludarte o conocerte; he investigado un par de casos; he participado en tantas entrevistas y programas -a parte de los míos-, hablando de OVNIs o de misterios, que ya he perdido la cuenta; grabado con televisión y, por supuesto, trabajando en mi trabajo cómo redactor -que nada tiene que ver con el misterio- para ganarme la vida. Y todo esto se hace con un afán: el de compartir, divulgar, narrar, explicar, dudar, todo aquello que nos lleva al Conocimiento.
Hace tiempo ya elegí un camino, al margen de polémicas o rivalidades, una línea que sigo y seguiré. A veces te preguntas si todo esto vale la pena, es una vida llena de sacrificio y de esfuerzo físico que sólo yo, mi cuerpo y mi mente, conocemos. Muchas veces tras una amplia sonrisa se esconde mucho sufrimiento y mucho dolor, pero hay que seguir adelante porque muchos de vosotros sois las causa que mi camino tenga un sentido.
Estoy «molío» pero sigo en el Camino, aún restan días a mayo y restan más firmas en la Feria del Libro, más conferencias (dos más), varias investigaciones y grabaciones de programas de radio y televisión, frenética actividad que se ve reconfortada con algo tan inmaterial como vuestro cariño. Muchas gracias.
Jose Manuel García Bautista
Personas con poco criterio
Me llama la atención algunos personajes del mundo del misterio… Cómo cambian de opinión según el viento sople. Ayer renegaban de unas cosas y hoy las abrazan, ayer publicaban pastorales en contra y hoy a favor de… ¡Qué poco criterio! ¡Cuánta falsedad! Las mismas pastorales que esconden su ignorancia, poco respeto hacia ellos mismos y que jamás cambiaron. Pastorales con falsa pretensión de ser un referente y que esconde poca preparación. Cuando uno lo ve desde fuera puede resultar hasta un mensaje medianamente coherente sino se tira de histórico de publicaciones… Cuando de hace comienzan los choques y situaciones extrañas. Abundan aquellos del «donde dije digo digo Diego» que se mueven exclusivamente por un interés y por un mínimo amor por el misterio, mínimo, pues ya les puede el mercantilismo.
Me resulta curioso aquellos que desaparecieron, que vendían ínfulas de grandeza, del eterno «voy a hacer» y de la real «jamás hago». Aquel que se sirve de criticar a los demás, con todo tipo de rumores infundados o descalificativos cuando realmente, cuando lo hace, está describiéndose así mismo así como su catadura moral. Los mismos que ayer querían destacar a toda costa en el misterio sin haber investigado nada, divulgado nada u ofrecido nada suyo, el trabajo de otros sí apuntándose la medalla como propioa. Aquellos que han engañado a grupos de investigación prometiéndoles la más alta consideración en el misterio, con apariciones estelares en televisión, y lo único que buscaban eran su porcentaje económico de la parte que pagan las grandes cadenas y figurar, siempre figurar teniendo a mano «San Google» y lo que otros han escrito y publicado en la red. Ladrones de información, ladrones de amistad y reclusos de su miseria. Aquellos que hoy son discriminados y que aún se preguntan la razón… Mirad atrás y lo sabréis. Se les reconocen.
¿Y que decir del exceso de titulitis al que asistimos en nuestros días? Qué a algunos les gusta figurar como presidente de, director de, parapsicólogo o vete a saber que extrañas titulaciones vemos hoy para reforzar una vacía postura que a pocos convence ya tras una fachada tejida a base de mentiras. Son los «Bienvenidos Mr. Marschall» del Misterio, aquellos que tras una pantalla esconde su realidad mísera. Siempre pensé que una persona no debía destacar -aunque la vida los haya hecho destacar o se les nombre-, siempre pensé que la mejor definición, el mejor título que puede tener alguien, es aquel que le impone o define su trabajo constante. Por sus actos los conoceréis.
Finalmente están los que tratan de sectarizar a un parte perdida del misterio, sin un rumbo fijo, tratando de explicar fenómenos bajo la capa de la falsa sabiduría. Aquellos que esconden el odio y el rencor y lo van soltando a unos seguidores adoctrinados que, en muchos casos, abren pronto los ojos de la «bilis misteriosa» que suelta el lunático de turno, el empastillado acabado, o el que perdió la cabeza en su propia ira…
Personajes del misterio que alguna vez hemos encontrado y que no deseamos tener en nuestras vidas, como el mal amigo que nos traicionó y que tras una nueva oportunidad nos volvió a traicionar. Si la vida fuera como Facebook ya estarían bloqueados, pero, en muchas ocasiones, aún nos tenemos que cruzar con ellos… Toneladas de «Nivea» y a pasar el mal trago pronto.
Jose Manuel García Bautista
¿Sabéis?
Cuando uno acude a un Congreso de Misterio lo hace cargado de ilusiones y sueños, con ganas de compartir conocimientos y devolver con palabras y gratitud todo el cariño que recibe de organización y público asistente, tratar, en 45 minutos, o 90, de dejar esa sensación en el espectador de haber asistido a algo único y enriquecedor, ese es, al menos, siempre mi propósito. Acudí a Eibar, al País Vasco -al que he aprendido a querer a base de mucha amistad-, llamado por un amigo, por alguien que me escuchaba en Canal Sur y al que hacía feliz en sus noches, él me llama Maestro pero yo no dejo de ser un aprendiz subido en un tren que avanza al ritmo de mi vida. Y mi amigo, mi AMIGO, Sergio Ruiz quiso hacerme un regalo de esos que le dan sentido y alma a la vida… Me invitó a ese Congreso como ponente, y las sorpresas llegaron cuando su simpática esposa, una gran amiga y mejor persona, Elena Gil nos acompañó, mimó y comprendí y valoré lo importante que era todo para ellos, habían puesto su esfuerzo, empeño y trabajo en algo que debía salir bien y, de hecho, salió bien. Ellos se merecen el reconocimiento eterno hacia aquellos que quieren el misterio pero que aman la AMISTAD. No tengo palabras para expresar mi gratitud hacia ellos dos. Eternamente agradecido.
Pero en ese Congreso tuve más sorpresas: encontré a amigos como Miguel Pedrero Gómez, Jorge Sánchez (al no pude saludar por que muchas veces no dejamos de ser palabras escritas en un mensaje, se escapó pero la siguiente será la nuestra amigo), Pedro Amoros Sogorb o el incansable Fran Recio G. Siempre amenos, interesantes y siempre con mucho que ofrecer. Magníficas las charlas de pasillo, magníficas, como siempre.
Descubrí a Teresa Porqueras con quien me une la pasión por el mismo tema y que desborda pasión en todo lo que hace, se le acumulan las palabras pero ¡qué forma de comunicarlas!, todo un honor. Sin olvidarme de Eduardo Lurueña que me sorprendió con su energía, con sus ganas, con su positividad, con su ilusión…, con su ilusión. ¡Cuanto tendríamos que aprender de ti amigo mío! Raul Sacrest y su forma de llevarnos por la montaña mágica, cuanta pasión en cada palabra que verbalizaba, o de Steve Locse y su apasionante charla, como las de Jaime Garrido, Iván Martínez o Sebastià D’Arbo, cuanto nos enseñásteis y, nuevamente, ¡cuanto tenemos que aprender!
Mis amigos Fran Abad, enorme el trabajo realizado y enorme su sacrificio, enorme su saber estar y su profesionalidad, pero me quedo con el tiempo vivido, de charlas compartidas y confidencias en un avión a 33.000 pies junto a José J. Villalón, enorme también su trabajo, sus ganas, su amistad y su profesionalidad, pero sobre todo me quedo con la Amistad de ambos y haber descubierto que este hermético amigo vuestro que os escribe, sevillano, también es humano.
Aparte dejo a los integrantes del «Fondo Sur» -como a mi me gusta llamarlo-, cuanta alegría me dio encontrarme y charlar, de lo divino y lo humano, con mi amigo Paco González, jamás te deja indiferente, maravillado con su forma de ver las cosas y con la amistad que descorchó Cristina, amigo mio: un placer y un enorme privilegio, bien lo sabes y recuerda: sabes donde tienes un amigo SIEMPRE. Bueno, bueno, bueno… Me encontré con el más andaluz de los vascos, menudo descubrimiento encontrar a Enrique Echazarra,gran conferencia, menudo amigo tengo en Vitoria, me he reído, he aprendido, hemos compartido charlas, amistad, que tío más divertido y lo que sabe, un enorme placer, sin olvidarme de Ana. Enrique, ha sido y es un placer, enorme, aquí tu amigo para SIEMPRE (incluyendo al abominable hombre de las… jajaja); finalmente me encontré con alguien que durante mucho tiempo fue una voz al otro lado del teléfono Juan Gómez Nueva Dimensión, ¿qué decirte amigo? Te llevas la misma sensación que yo tuve al conocerte, pocas palabras hay, pensamos de la misma forma y sentimos de la misma forma, tenemos un concepto de la vida tan similar que impresiona y como no, quedo rendido ante tus conocimientos y forma de exponer las cosas, pero… ¿Sabes? Me quedo con lo vivido en la trastienda del Congreso, en horas de amistad, de caminar por las calles de Eibar, de pinchos o de buscar la cerveza local y bebernos la vecina, de tertulias, de momentos de risas o de confidencias, creo que he ganado un amigo para toda la vida y, evidentemente, tras un gran hombre siempre hay una gran mujer, por qué Rocío Gandarillas Alonso vale un imperio, por simpatía, por saber estar, por sinceridad, por conversación y por su eterna sonrisa, por su enfoque de las cosas, por su forma de hablar y de escuchar… De verdad: tenéis al sur de España vuestros amigos y vuestra casa, para SIEMPRE.
Me quedo en mi retina con todas esas imágenes, lo digo mucho: los recuerdos son las fotografías del alma y me habéis dejado una de las fotografías de mi vida más bellas. GRACIAS A TODOS.
Jose Manuel García Bautista
¿Cuántos amigos tienes?
¿En cuántas ocasiones nos preguntamos, ante una red social, cuántos amigos tenemos? hay quién responde que 5000, otros que 2000, los más afortunados puede que superen los 20.000 y, realmente, amigos de verdad, de los que no fallan tenemos muy pocos, se cuentan con los dedos de una mano y sobran dedos.
Tendemos, en los últimos tiempos a tomarnos apresuradamente el concepto Amistad, se pueden hacer amigos en las redes sociales, por supuesto, pero amigos son los que están junto a ti en los momentos malos y en los buenos, aquellos que jamás traicionan, que no murmuran a las espaldas, que no presentan ni dobles juegos, ni doble cara y aristas en una relación en la el concepto principal es la amistad: darlo todo sin esperar nada a cambio, libre de intereses y otros valores donde el altruismo y la libertad de hacer las cosas por gusto parece que es parte del recuerdo.
Con demasiada ligereza un amigo, de esos mal llamados de siempre, busca algo en ti, que le sirvas de puente para llegar a alguien, estar a la sombra de para recoger beneficios colaterales, una golosa agenda de medios, conocer a otras personas o acceder a lugar donde sólo alguien con tú puedes… Son esas otras amistades que aunque cuesta trabajo cogerlas se les acaba cayendo la máscara.
Y es que las amistades de hoy día, salvo esos amigos de verdad, son como ir a un baile de máscaras en mi querida Venecia, donde al llegar la media noche, entre el lujo y la suntuosidad, entre lo barroco y lo arcaico, se acaban descubriendo las caras libres de caretas y al final sólo quedas tú a solas con la verdad.
¿Es difícil encontrar un amigo de verdad hoy día? No es difícil, siempre hay personas honestas, buenas, como tú, dispuestos a tender una mano por el placer de ayudar, pero hay diez, en contra, que buscarán -o acabarán buscando- un doble juego, un beneficio a la amistad, por dinero, por imagen, por recobrar el prestigio perdido o hacerse de un prestigio, por ego, por notoriedad…
Vuelvo a preguntar, desde el corazón: ¿Cuántos amigos de verdad tiene? Quizás ya se haya respondido leyendo esta humilde y sincera opinión de aquel que busca y casi no encuentra.
Jose Manuel García Bautista
Miserias del alma…El perdón
Seguramente alguna vez haya tenido un problema o un lío en el que le ha metido un amigo o un mal llamado amigo. Uno de esos que tras la primera trastada, quizás la única y la más gorda, prefiere congelar por siempre jamás u olvidar por toda la eternidad. Seguro que ha confiado en una persona y esa persona le ha devuelto la amistad con ingratitud y traición. ¿Recuerda como se sintió? El tiempo lo apacigua todo y pasa… Pero los recuerdos permanecen.
A veces esa misma persona, en un alarde llega, al cabo de las horas, días o pocos meses, o año/s, con la palabra que se usa últimamente muy a la ligera: PERDÓN. Y el ser humano, más en su bondad, lo otorga… No habría problemas si fuera un hecho puntual -aunque hay cicatrices en el alma que siempre permanecen-, el problema es cuando otorgas ese perdón y eres consciente que esa persona, lejos de enmendarse sigue su turbio juego de mentiras y manipulaciones, de conspiraciones y retorcer las palabras para evadir actos que sabe que son erróneos, pero su vida es una mentira, una mascarada en la que sumir a otros y engañarse así mismo. Es la mala persona que demostró ser antaño.
Tal vez se haya preguntado: ¿Qué hacer con este tipo de individuos? Lo primero es tener consciencia de quien es y el lugar que ocupa en tu vida, el que quieres que ocupe y en el que se merece estar. Lo segundo es analizar que aporta a tu vida… Si sólo son problemas, falsa fachada de imagen y buenas palabras (que ya se encarga de estudiar a cada uno para decirle aquello que quiere oír y quedar como lo que no es: bueno),sabrás que tras ello se esconde la negrura del alma, el infinito no-ser, el aspirante a persona que se mueve en la inopia de la vida… No lo dudes, apártalo.
Cuidado… Son hábiles con la palabra, recurren al diccionario y usan términos como «estrategia», «plan», «control», «experimento»… apelan al ego, a los sentimientos, a las adulaciones o evocaciones del pasado. Excusas vacías que disimular actos fríos, calculados y falsos. Cómo aquellos que dicen llevarse bien con una persona y cuando surge un sarao no dudan en criticar a esa persona con infamias o ser indolente a las críticas que se hacen a la misma… Esto también esconde la cobardía del que trama y esconde algo y no se atreve a mirar a los ojos a esa persona y… hablar, aunque los pocos que se atreven a ello es por la típica huida hacia delante, tener muy poca vergüenza y creer engañarte de nuevo (cuan equivocados). Pero para ello hace falta valor y humanidad. Quien se vea retratado que tome nota, entre otros muchos va por ellos.
Si no tienes más remedio que convivir con el/ella procura que sea lo estrictamente necesario, nada aporta a tu vida más que problemas, disgustos y enterarte como te despelleja a espaldas tuyas, por delante buena cara… o, cómo se lleva hoy día, buenas palabras en una pantalla de móvil por mensajería instantánea (Whatsapp) dando a cada uno lo que quiere leer sin saber que el cazador ha sido cazado. Miserias del alma.
Jose Manuel García Bautista
La fauna social
No soy de esas personas que suelen tener preparado un arsenal para cuando alguien, motivado por oscuras intenciones, quiere atacar dentro de una sinrazón con falsedades o acusaciones, incluso aquellos que se la dan de listos y de conocerte y sólo demuestran su pobreza espiritual y lo poco, paradójicamente, que te conocen. Seguramente alguna vez ha tenido un amigo de esos que le gusta liar todo tipo de situaciones y tratar de salir indemne de todas ellas a base de mentiras…, siendo él/ella culpables. Una mentira más gorda para tapar una mentira anterior…o hablar a espaldas de. El problema, decía mi madre, es que las «mentiras tienen las patas muy cortas» y si uno anda metido hasta las cejas en el mundo del periodismo, y no sólo de misterio, se acostumbra a contrastar la información, cotejar datos y verificar fuentes, el resultado: que el mentiroso es cazado. Pero es moneda de curso en nuestra sociedad de hoy en determinados personajes que no saben donde agarrarse sin saber que la mentira no es el camino.
Tampoco aquellas amistades interesadas que buscan siempre algo bajo la bandera de la amistad, amistad mal entendida, aquella que uno ofrece de corazón y otros toman como «voy a aprovecharme de este tonto a ver que le saco». Seguramente se ha sentido utilizado por algún amigo, o tiene un amigo que en su inconsciencia lo trata de tal forma, en su parasitar no le quepa ninguna duda que mañana, o pasado, le dejará sino tiene algo que ofrecerle, perdiendo el interés por usted, que dicho sea de paso es lo mejor que le puede pasar. Siéntase aliviado.
Igualmente, centrándolo en el misterio o siguiendo con la vida normal, hay oscuros personajes de eternas sonrisas y falsas palabras que prometen lo imposible por ganarse el favor de la persona o grupo, no quiere ayudarte, quiere desangrarte. Incluso aquello que no está en sus manos. Para ello todo tipo de tretas son validas: hablar de vetos que sólo existen en su desquiciada cabeza (e interesada), de exprimir sin contemplaciones a la persona objeto de su interés -sobre todo económicamente y en una obsesión por el dinero ajeno-, de pedir dinero por determinados «favores» o de vender grandezas donde sólo hay pobreza, codicia, ego, deslealtad y mentiras. Desconfíe de aquellos que le prometen alcanzar la gloria y «El Dorado» por que tras sus bellas palabras sólo hay interés… Sus argumentos, notara, pierden fuerza con el tiempo y donde hubo palabras ahora sólo habrá vacío. Qué el minuto de gloria no sirva como excusa para engañar a muchos con lo que no se es y nunca se será. Y hay muchos así.
No puedo olvidarme de aquellos que van de expertos y no tienen más experiencias que las de fabular en un mundo tan irreal como muestra evidente del «estoy mejor en casa». Quemar teclado y contar las historias de siempre o aquellas que nacen en la imaginación son el producto de lo que se pueden encontrar.
Aparte quedan el típico amigo tontolisto, o el desprotegido o el falso hijo pródigo… Cualquier cosa. Aduladores en unos casos, palmeros en otros, «si si a todo si» en otros y luego «lo que me de la gana» y de aquellos que cuando te ven de espaldas corren a sembrar rumores y algún que otro puñal… ¿Os suena? Gente de los que hay que desconfiar.
Si se reconoce en estos cuatro perfiles encienda las alarmas de su vida, propóngase un cambio inmediato por que ser mala persona hoy día provoca el rechazo y la discriminación de aquellas que tienen unos valores éticos. Encontrará amigos, posiblemente, pero todos tan hienas como usted y acabará olvidado por la manada, sumiso ante otro líder o formando otra manada carroñera en busca de otra víctima que satisfaga sus siempre voraces y bajos instintos. Es el momento del cambio aunque para muchos es ya demasiado tarde.
Jose Manuel García Bautista
No es lo mismo ser bueno que ser tonto
NO ES LO MISMO SER BUENO QUE SER TONTO, aunque mucha gente lo confunde atendiendo a sus propios intereses y a lo que puedan llegar a manipular una situación, un mensaje o la palabra colgada. Estoy cansado, lo reconozco. Cansado de aquellos que miente descaradamente, que ponen una mascarada para camuflar mil y una situaciones, mentiras que tapan a otras me tiras con mentiras más gordas, dirán: «Ya puestos…¿Por qué no?». Cansado de aquellos que se aprovechan del trabajo ajeno y lo quieren hacer por propio, cansado de tanto parásito con doble cara y a doble juego con estrategias vistas desde lejos… «Este es tonto y por eso me aprovecho» dirán… El problema para ellos es que la tontura sólo es bondad o, lo peor, indiferencia. Aplicadlo a todos los ámbitos de la vida… Seguramente alguna vez os han tomado por tonto en un mundo de listos donde el listo es realmente el engañado y el tonto… Cansado de falsas ilusiones, de engaños y, nuevamente, falsedades. Por desgracia moneda común en nuestro mundo de hoy. CONSEJO: Quitad de vuestra vida aquello que no os aporte. Os irá mejor.
Jose Manuel García Bautista
Lo que de verdad importa
Me importáis todos y cada uno de vosotros pero no por Facebook sino por qué esta vida hay que vivirla más allá de una red social. Parece que las redes sociales nos han acercado a todos, y así es, muchas personas de otras latitudes nos son conocidas por la red social, esta u otras, pero lo cierto es que también hay personas que están descuidando sus relaciones personales, el contacto con la vida, por sumergirse en la vida virtual… Qué está muy bien pero que en determinados entornos nos aleja de la realidad.
Leo, a menudo, a personas, amigos , menos amigos, desconocidos, que descargan la rabia y la ira contenida sobre el teclado, otros que hablan de grandezas e irrealidades que no pasan de su cabeza –cierto es que todos tenemos sueños pero no está bien verbalizarlos como una realidad o vendiendo humo, algo que no existe-, otros tienen una personalidad diferente en la red y cuando le preguntas sólo te dicen: “Bueno, es mi otro yo en las redes sociales”… Fascinante, muchos –no todos- aparenta lo que no son y desearían ser, como la vida misma llena de insatisfacción y, por supuesto, satisfacciones.
Sólo tengo una cara, la que se ve, la que se lee, la que sienten los amigos, por eso no me van los dobles y triples juegos, de los que te haces el tonto pero que sabes perfectamente el cómo, el cuándo y el por qué resultando divertido escuchar las explicaciones de la otra parte así como las excusas y mentiras que la enmascaran. “Amigos” de esos de paso que te conocen y tienen oscuros propósitos, muestran la cara amable tras la que se esconde la real e interesada… De los que buscan algo de ti cual parásito, todos conocemos a alguno. Todos esos me sobran como sobras las banalidades y las nimiedades que originan una guerra, una convulsión y qué, analizado fríamente, no deja de ser una solemne tontería. Nos enfadamos por absurdeces, por celos infundados o recelos que van con la propia persona y que luego tienen poco de realidad o mucho de la misma… En cualquier caso la persona es soberana en sus relaciones para elegir amigos y, de lo contrario, pasar página y escribir un nuevo capítulo en su vida.
Suelo decir las cosas como las pienso, con mi diplomacia, pero siempre la verdad y de cara… aunque duela, considero que es más honesto decir la verdad que una mentira complaciente, y mucho más sincero. No ato a nadie a mi lado, el que camina junto a mi camina por propia voluntad, no obligo a nadie a trabajar o hacer lo que no desea, es cualquier caso es decisión suya y su trabajo, pero jamás una obligación. Se pedir perdón cuando me equivoco por qué no somos perfectos y todos nos equivocamos, más aun cuando se puede llegar a hacer daño a las personas, pero no todos tienen esa virtud y, aunque no lo parezca, tengo hasta mal genio pero jamás dejaré de poner una sonrisa en mi boca y en la boca de aquellos a los que quiero en mi vida… En esta vida hay dos certezas: cuando se nace y cuando se muere, el resto está por escribir y no la quiero dejar escrita sin poner, con grandes letras, que hice feliz a muchas personas de muy diferentes formas.
¿Por qué os digo todo esto? Para que me conozcáis me conozcáis mejor, que no deje de ser un muro en una red social que escribe de misterios y de Historias, de noticias y sucesos, programas y de frases bonitas con moraleja… Qué conozcáis mejor a quién está detrás de todo ello y sobre todo para que sepáis que hay otra vida y quien lo desee, de libre elección, puede comenzar a caminarla y caminarla conmigo.
Jose Manuel García Bautista
¡Cómo está el mundo del misterio!
Los humanos somos animales extraños a los cuales, periódicamente, nos gusta hacer balance de todo. La mayoría de las veces sin un verdadero propósito de mejora. Uno de los balances que, por desgracia, arroja los resultados más dramáticos es el de la profesión periodística. Analizar los defectos, problemas y carencias del periodismo nos llevaría muchas páginas y muchas horas y lo no es lo que nos ocupa ahora. Por eso voy a centrarme en uno de sus puntos más críticos que está poniendo patas arriba también el mundo del misterio. Me refiero al intrusismo.
Evidentemente cuando hablo de intrusismo no estoy haciendo alusión a esos amigos con los cuales más de una vez uno tiene el privilegio de compartir momentos mágicos, o más a nuestro tono, momentos deliciosamente terroríficos y misteriosos. Jamás me atrevería a hablar mal de ellos porque sé que su pasión es verdadera y, no importa que lleven 15 años investigando o que sea un novato lector que, por fin, se haya atrevido a asomarse al corazón del misterio, pues siempre lo hacen con el más absoluto de los respetos.
En televisión ya estamos acostumbrados a que quieran darnos gato por liebre. Y lo consiguen. Presentando como colaboradores y tertulianos a meros personajes de ficción cuyos únicos méritos mejor no vamos a nombrar aquí. Por desgracia en el mundo del misterio se está experimentando un paralelismo tan idéntico como desolador. Y es que ser la gallina de los huevos de oro tiene como consecuencia que acabas criando cuervos. Creo que a buen entendedor pocas palabras bastan.
Un investigador, de lo que sea, no se hace en una noche, y sin embargo, bien pareciera que el carnet de investigador fuese hoy como la muñeca chochona del momento, es decir, el premio que todos obtienen en una tómbola de feria. Ni qué decir tiene que esto distorsiona y empaña la figura seria y comprometida del auténtico investigador de fenómenos sin explicación aparente.
Amar el misterio es sentir una infinita curiosidad por cuanto nos rodea hasta el punto de abandonar nuestra zona de confort y transgredir lo comúnmente asumido. Un investigador, lleva la perseverancia por bandera, y posee una curiosidad igualita a la que reina en los mirada de un niño. Y es curioso, pero he podido constatar que los mejores profesionales del misterio, interiormente, son muy niños. Sé que es triste, y sobre todo absurdo, pero en el mundo del misterio, como en los cuentos, si hay lugar para las hadas, debe haber también su lado oscuro. Y entre las sutiles sombras del misterio, se ampara a menudo un Capitán Garfio que, envidioso va tratando de robar los tesoros que los exploradores del mundo han ido descubriendo en sus largas travesías.
El misterio se parece a la amistad. Por no decir que la amistad es ya un misterio en sí misma. Uno y otro son un muro infranqueable donde a veces se suceden cosas inexplicables. Tanto para bien como para mal. De nada sirve distinguir entre grandes y pequeños cuando la muerte misma, las emociones, los miedos y los deseos. Todo aquello que nos arrastra al misterio, no conoce de tales distinciones. Regresando al espíritu más inocente pero intrépido que deben tener quienes osen aventurarse en el mundo del misterio, quiero hacer justicia terminando esta entrada con una de las frases de Ego Renzo, el crítico más voraz pero justo, que en Ratatouille nos dio una gran lección: “Cualquiera puede cocinar, pero no cualquiera llegará a ser un buen cocinero”. Aplicada al mundo del misterio podemos afirmar que si bien cualquiera puede jugar a que investiga, no cualquiera es un buen investigador. Quien tenga oídos, que oiga.
Teresa Bernal
COCINEROS ANTES QUE FRAILES
Hace unos días me sorprendía -¿o tal vez no?- con una conversación que tuve con dos chicos con los que me cité. Fue muy curioso. Nada más vernos se presentaron como: «Eduardo y Javi, investigadores paranormales y de misterios». Eso llamó mi atención. La pregunta era obligada: «¿Qué habéis investigado?» y la respuesta fue: «aún nada pero queremos ir a «Casa de la Loca» y ver que pasa». Entonces les comenté: «¿Tenéis equipo?». «No, no hace falta, somos muy sensitivos». Y el grado de perplejidad fue en alza.
Entonces, animado por la conversación les pregunté por sus autores favoritos, por sus investigadores de cabecera y me respondieron: «Zack Bagans, el de Buscadores de Fantasmas». Respondí: «¿Y Josep Guijarro, Lorenzo Fernández, Francisco Contreras, Iker Jiménez… o Fernando Jiménez del Oso, Miguel Blanco o J.J. Benítez… entre otros?» y la respuesta fue aún más desconcertante: «¿Quienes son esos?», uno de ellos dijo seguro de sí mismo: «Bueno, el Iker ese es el de «Cuarto Milenio», pero ese no investiga, ese presenta un programa, los otros ni idea. A ti te hemos visto en la tele y conocemos tu programa». No sabían quienes eran parte importante de la Historia Viva o actual del misterio… Un desconsuelo.Y se te viene el mundo al suelo no porque no conozcan a grandes del misterio o a las nuevas generaciones que han sido todos cocineros antes que fraile y se han hartado de investigar para luego ser grandes divulgadores y comunicadores y que siguen con sus investigaciones. Desconocimiento, mala ubicación,… lagunas enciclopédicas del mundo del misterio que denota algo vital: falta de formación y de cultura del misterio.
En un momento de la conversación uno de ellos dijo: «yo soy el científico del grupo, él el sensitivo»… Pregunta: «¿Qué has estudiado? ¿Electrónica, informática, ITI, IS?» y nuevamente un naufragio: «nada de eso, dejé de estudiar hace un par de años, no valgo para estudiar (en el equivalente a 2º. de BUP)». Así que no tenía ninguna idea de conceptos básicos y tratamiento científico. Así pues fue concluyendo la conversación.
No todos los nuevos investigadores son así, a Dios gracias, pero noto y observo como hay ganas (demasiadas) por aparentar lo que se quiere ser antes de serlo, se poner el título o autodenominación antes que la experiencia y la formación, de no escuchar los consejos de aquellos más mayores que pueden ayudarlos y orientarlos en la formación, de querer parecerse a «héroes» de la pequeña pantalla con más ficción que realidad, de no leer y cultivar el conocimiento básico del misterio (terminología, fenomenología, casos, Historia, conceptos básicos en suma), lagunas demasiado grandes para ser salvadas con algo más que las ganas (siempre loable) y teniendo como pequeño imperio un muro de facebook. Hay que corregir esos errores, con tiempo a todo se llega pero construyamos el edificio por los cimientos, no por el tejado, de lo contrario MAL irá el mundo del misterio. Es un ruego.
CUATREROS DEL MISTERIO
Desde hace mucho tiempo, años ya, el equipo de «Voces del Misterio» investiga en el Sanatorio de los Muerto o Complejo Hospitalario de San Pablo, donde otro investigador como Javier Lobato ha realizado también años de investigación. Ahora nuestros casos resultan inspiradores para Cuarto Milenio que viene un día, pasa un par de horas por la noche y vende una investigación que jamás ha realizado ni seguido en el tiempo.
No citará fuentes (ya sucedió con el caso de Umbrete y el poltergeist agresivo o La Casa de las Sirenas entre otros), obviamente, pero la hemeroteca está ahí, sólo hay que consultar en esta web o en Ivoox la de programas que se ha dedicado a este tema o las investigaciones en directo vía radio en Canal Sur, SFC Radio o Radio Giralda, artículos en revista como «Enigmas» o «Año/Cero» firmado por nuestro compañero Jose Manuel García Bautista o Jesús Camacho y Fátima Barragán, incluso incluido en varios libros editados desde 2009 hasta la fecha de donde se sacan los datos y la información junto a los archivos de Javier Lobato.
Resulta curioso que en lugar de Cuatro Milenio se les comience a llamar Cuatreros del Milenio, por algo será… Todo ello con sus falsos colaboradores y el autoimpuesto título por ser amigo de un colaborador. Lo que es la vida… Ahora una nueva investigación inspirada en nuestras investigaciones. Bueno es saber que están tan secos de ideas y que nuestra presencia ha servido para que lleven a la pequeña pantalla casos tan nuestros. Al fin y al cabo GRACIAS, lo mejor está aún por llegar y lo peor es quién busca dos minutos de gloria camuflado en vender la palabra amistad y hacer negocio con los amigos… Mala venta la amistad, mala creatividad si tienen que recurrir a copiar.
De lectores y amantes del misterio
Existen muchos tipos de lectores, los que leen para divertirse, los que lo hacen con afán de conocimiento, para evadirse, para vivir aventuras, para soñar… Luego, cada género literario tiene también su propio perfil de lectores típicos. Los libros de misterio y fenómenos paranormales, sin embargo, destacan por una particularidad especial, y es que con ellos se rompen todos los tópicos.
Los amantes del misterio somos mucho más que aficionados a la lectura, somos frikis, sí, y a mucha honra. Somos cómplices que se reúnen casi a hurtadillas, como hacían los investigadores del siglo XVI, buscando verdades que se esconden más allá de lo permitido. Sin pretensiones de nada, a los lectores y amantes del misterio, nos basta simplemente con el gozo de bucear por las entrañas de lo desconocido, por los rincones del alma donde se esconde la poesía de la vida. Siempre tratando de hacer el mínimo ruido para que no se rompa el silencio respetuoso donde descansa, como una bella dama a la que nos gusta contemplar, la magia del misterio.
¿Existe vida más allá de la muerte? ¿Qué hay cuando morimos? Si es que existe algo más allá de esta vida que conocemos, ¿qué es? ¿Dónde están nuestros seres queridos que se fueron? Y la pregunta más delicada, ¿podemos contactar con ellos?, ¿podemos ayudarles?, ¿nos pueden ayudar? La gran pregunta de la humanidad junto al misterio de la vida, es el misterio de la muerte. Una atractiva incógnita a la que no le importan los colores, ni las ideas políticas, ni siquiera las creencias religiosas, porque está más allá de todo eso. Un misterio que no conoce de barreras geográficas, ni lingüísticas, ni temporales, ni siquiera culturales. A todos nos preocupa, inquieta y, para qué negarlo, nos fascina la muerte.
Y para muestra, un botón. Recientemente tuve la oportunidad de asistir a la presentación del libro de un compañero, “Guía de la Andalucía Mágica”, de José Manuel García Bautista. Se trata de un libro que, sin duda, será un referente para los lectores, pero también para todos los amantes del misterio, como ya sucedió con la “Guía Secreta de las Casas Encantadas de Sevilla”. Pero lo que pudimos presenciar allí fue mucho más que una mera presentación literaria. Fue algo, desde mi punto de vista, fascinante. Una perfecta comunión entre escritor y lector. Algo, que solamente se produce cuando autor y lector se confunden en una misma persona, cosa que por contradictorio que parezca, no siempre sucede. Esta es una de las cosas mágicas del mundo del misterio donde ambos compartimos un mismo latido.
Pero la guinda del pastel la puso Laura Falcó. La editora de Planeta, quiso dar rienda suelta a su pasión por los fenómenos paranormales, y llevar a cabo una demostración de cómo funciona la spirits box, uno de los muchos instrumentos que los expertos utilizan en sus investigaciones cuando visitan lugares encantados. Los asistentes se convirtieron en testigos en vivo de una mini sesión de neo espiritismo. O más que testigos, fueron parte implicada. Unos se lo creyeron más y otros meno. Pero todos se llevaron a casa el regalo más digno y respetuoso que un escritor puede hacer a sus lectores, además de la promesa de seguir escribiendo para ellos, hacerles protagonistas de sus vivencias.
Hoy que, por desgracia, el misterio se ha convertido en la gallina de los huevos de oro para unos cuantos que no tienen reparos en menospreciar y pisotear, con críticas maliciosas, a compañeros que, con su tesón, su esfuerzo diario y también con su talento, logran rozar el misterio más grande todavía: el de la confianza y la fidelidad de quienes, en actos como estos, además se ven inesperadamente recompensados. Y es que los lectores de misterios y fenómenos paranormales, son personas inquietas, que se hacen preguntas, que sueñan y que tienen cuanto menos curiosidad. El que más y el que menos, aunque no se atreva a reconocerlo, habrá vivido alguna experiencia que le ha empujado a querer saber más. Posiblemente más de uno de estos lectores haya jugado a ser investigador en algún momento de su vida, pero por razones lógicas, la mayoría no tendrá oportunidad de formar parte de una investigación con profesionales. Para ellos, habrá sido un día mágico que tardarán en olvidar.
Como decía Bécquer: “Mientras haya un misterio para el hombre, habrá poesía”. Y yo añado, que además habrá esperanzas, ilusiones, y sobre todo, continuará habiendo una inmensa curiosidad en el ser humano por estudiar, por aprender, por conocer qué se esconde más allá de lo que aprecian nuestros ojos. El misterio es adictivo. Y estos lectores, ahora lo saben. Tienen la llama del misterio corriendo por sus venas.
Teresa Bernal
Han sido 14 años los que ha permanecido en antena un excelente programa radiofónico de misterios llamado «Milenio3», dirigido por Iker Jiménez, en la Cadena SER. 14 años en los que han hecho pasar miedo, viajar, conocer y vivir mil experiencias a los oyentes que cada noche dejaban la puerta abierta de su radio para que Iker y su equipo entraran a susurrarle al oído lo que de mágico tenía, y tiene, éste mundo de lo paranormal y lo inexplicable.
«Milenio3» era el sueño de Iker Jiménez, bien lo se, y durante estas últimas 14 temporadas de lo ha hecho realidad en cada relato, casa caso o cada testigo que llevaba al estudio. Ayer puso un Adiós el programa a su andadura radiofónica, pero tengo claro que más que una adiós será un hasta luego, como nos gusta decir en el Sur.
Viví ese maravilloso ambiente, de forma directa y en primera persona, durante los 4 primeros años del programa con compañeros de viaje en «Milenio3», siendo parte del programa, tan increíbles como Francisco Contreras, Luis Mariano Fernández y muchos otros. Todos pasamos largas jornadas de misterios y palabras en el programa. Por ello hoy es un día de despedidas a todos los que en el pasado o en el presente pasaron por esa «casa» y divulgaron a través de ella. Atrás quedarán momentos buenos y malos (que de todo hubo), atrás quedaron experiencias, horas de amistad, confidencias y palabras eternas. Pero lo que siempre sobrevivirá es el misterio más allá de las personas.
El programa hace un descanso «sine die», como se suele decir: «mañana será otro día» y siempre estas pausas han servido para engrasar la máquina y volver con más brio y hasta de emisora de radio. La magia de la radio es inalcanzable para la televisión (bien lo se)… En la radio somos cómplices y confidentes, se habla uno a uno a cada oyente y la comunión con el oyente es máxima. Hay que dar las gracias a Iker Jiménez y su equipo por 14 años de magia y de sueños.
Siempre que un programa de radio «desaparece» es momento para lamentar, ya sucedió cuando temporalmente desapareció del dial «La Rosa de los Vientos» de mi querido Juan Antonio Cebrián, o «Espacio en Blanco» de mi buen amigo Miguel Blanco,o -a nivel loca-l cuando Radio Betis cerró de la noche al día y dejó a un programa de misterios como «Voces del Misterio» con la incertidumbre del futuro… Ayer se despidió «Milenio3» y las noches serán un poco más huérfanas. Un deseo: suerte, en los nuevos proyectos y en la vida.
Yo no digo HASTA SIEMPRE MILENIO3, digo HASTA LUEGO MILENIO3 porque, estoy seguro, que pronto tendremos noticias, sólo será un suspiro en el tiempo.
Jose Manuel García Bautista
Cainismo misterioso
El mundo del misterio es muchas veces agradecido y muchas veces cainista, más aún si cabe cuando desde grupos de investigación o programas de radio se divulgan investigaciones realizadas a pie de campo por personas que exponen su tiempo y su dinero sin ganar nada a cambio más que la satisfacción y el orgullo de servir y ser útil al misterio.
Desde los inicios de aquellos que se reúnen en grupos de investigación, o forman los mismos, la aspiración es ir a aquellos lugares donde se manifiesta el misterio, da igual que sea un paraje, edificio o lugar conocido o desconocido, encantado o no, siempre hay algo que encontrar y buscar en su Historia, siempre hay un dato interesante que aprender.
Al amparo de esa misma inquietud han nacido muchos grupos de investigación en la provincia de Sevilla merced a las “Rutas de Misterio”, donde la pretensión es enseñar –de forma aproximada- los primeros pasos a realizar en una investigación, con una documentación previa del lugar, buceando en su historia, y luego la investigación paranormal con cuidado y precauciones. Siempre en pro de buscar lo imposible. Me consta que hay grupos que siguen esa misma política y que hacen un gran trabajo y también tratan de saciar sus inquietudes. Tiene otra lectura: agrandan sus horizontes y conocen mejor su entorno y su tierra, que aún es más importante, y no ceden ante el desaliento.
El desaliento llega, en muchas ocasiones, en forma de ingratitud, de aquellos que sin saber ni conocer ponen en duda su trabajo o de forma sistemática niegan una investigación que ni tan siquiera conocen salvo por haber leído algo, en muchas ocasiones lo publicado es sólo una pequeña parte de dossiers muchos más cuantioso en información y páginas. Pero pese a ello reciben críticas y se cuestiona su trabajo. Son aquellos que amparados en un falso amor por el misterio niegan y atacan al misterio o a aquellos que sus fobias personales han tejido tramas tan oscuras como dementes. Pero sucede en la actualidad. No se debe caer en la desidia debido a ello, este tipo de personas siempre han existido y el camino no se detiene en ellos, ellos están al margen del camino, no en él, por mucho que garanticen lo contrario.
La labor de un divulgador, de un investigador, es investigar y contar sus experiencias y descubrimientos, de forma objetiva, con el testimonio de testigos, sabiendo que todos somos susceptibles de ser engañados y que toda historia tiene matices y puede verse alterada o ligeramente cambiada, pero el compartir información y puntos de vista enriquece a la propia investigación. La tarea, la nuestra en éste caso, ha sido la de formar a muchas personas y darle esos conocimientos previos para que puedan seguir su camino solas o con nosotros si es su deseo, de forma libre y sin caer en prejuicios ni convencionalismos o haciendo guerras que no son suyas.
Como trabajo que se expone públicamente está sujeto a ser criticado, otra cosa es que esa crítica sea más justa o más injusta (que de todo hay) y lo que se esconde detrás de cada una de ellas, siempre habrá quién busque la polémica y ensombrecer el buen trabajo ajeno para querer disimular su propia inactividad ante un mal camuflado y falso conocimiento.
Al final lo que queda es el trabajo bien realizado, con la conciencia limpia que desde un blog, un programa de radio, un canal de televisión, un canal en youtube o un simple comentario en una red social lleva al fruto del esfuerzo y la investigación limpia y honesta, mostrando lo que hay, lo que nos han narrado y lo que se ha obtenido, sin más. Luego cada persona es un mundo y estará más o menos conforme o de acuerdo pero es la verdad de cada uno, con su objetividad, su honestidad y su franqueza.
Desde nuestro programa y medios seguimos nuestro camino, paso a paso, metro a metro, experiencia a experiencia, no tenemos ni tiempo ni ganas de polémicas ni peleas absurdas con más mentiras que verdades y más odios cultivados que sincero diálogo. El tren sigue en marcha, rumbo al misterio, sin perder el tiempo en aquellos que hacen crítica fácil con argumentos manidos y siempre recurrentes en una sinrazón detractora del misterio. Nosotros amamos el misterio y por ello seguimos hacia delante dejando atrás murmullos, rumores y falacias. Construir… no destruir, esa es la clave. Paz y armonía, no lo contrario.
Han nacido muchos grupos de investigación nuevos y esperamos que sigan naciendo porque ello da imagen que nuestro mundo del misterio sigue vivo, que desde nuestro programa, nuestros medios o rutas hemos alentado a investigar y saber investigar con prudencia y cautela, y sobre todo saber que ante todo somos un nutrido grupo de amigos con un doble objetivo: el MISTERIO y la AMISTAD, toda una declaración de intenciones.
Jose Manuel García Bautista
¿Dónde están los OVNIs?
Eso parece que se preguntan muchos cuando durante todo el año los buscan y no los encuentran y ahora, en verano, proliferan las alertas OVNI para buscar a los siempre esquivos NO IDENTIFICADOS.
Crecí en el mundo de la investigación paranormal siempre siendo un «cazador de OVNIs», acudiendo a alertas OVNI (con más menos que más fortuna) y estando siempre atento a los que maestros como Ignacio Darnaude -la gran eminencia del Sur-, Joaquín Mateos Nogales, el padre Enrique López Guerrero, mi querido Julio Marvizón y muchos otros tenían que enseñar y nos accedían a contar en más de una conversación o charla, formal o informal, conferencia o no, de estos apasionantes temas.
Y así estuve en algunas de aquellas históricas alertas con maestros del misterio, y organicé -para «Milenio3» en 2004- la Alerta en Sevilla con más claro-oscuros que satisfacciones, y acudí a otras como invitado, como experto, como aprendiz, como divulgador o como amigo… y ¿sabeis? De todas se saca algo positivo.
¿Donde están los OVNIs? Muchas veces no hacen falta buscarlos fuera… quizás estén dentro, quizás sólo sea un fuerte deseo de encontrarnos con el misterio, con lo paranormal, con lo imposible, y los OVNIs sólo sean una parte de ese bendito deseo.
Llega el verano y toca mirar al cielo, disfrutar de la bondad del clima, ver satélites, algún que otro meteorito, alguna vez algo que no sabemos lo que es y son satélites espías, la ISS, algún vuelo nocturno o…¡Lo imposible! Hemos de saber lo que hay ahí afuera y saber convivir, y saber estar. VIVIR Y DEJAR VIVIR; tal vez sea la excusa perfecta para lograr la armonía y la paz.
Quizás vaya a la alerta de mi amigo Javier Lobato, otro incansable soñador, o tal vez a la de Dos Hermanas o Alcalá…¿quién sabe? Y tal vez sea la ocasión de encontrarnos cara a cara con el misterio o haber echado la noche con unos buenos amigos.
Jose Manuel García Bautista