Según nos cuenta la historia, Marie era una mujer de color y libre que nació en el Barrio Francés de Nueva Orleans, hija del rico hacendado blanco Charles Laveau y de la mulata Darcental Marguetto. Era una joven de belleza, de pelo negro, piel morena y ojos de mirada penetrante. Le gustaba cubrir sus cabellos con un casquete hecho de tela de colores brillantes. Se casó con un negro libre el 4 de agosto de 1819, Jacques Paris, emigrado de Haití. Como ambos eran católicos lo hicieron en la Catedral de San Luis. Pero al mismo tiempo, se dice que ambos practicaban el vudú y otras hechicerías.
En 1826 su primer matrimonio llega a su fin con la trágica muerte de su esposo, bajo circunstancias no aclaradas. En el mismo año, Marie comienza su segunda relación con otro hombre negro y libre, Chistope Glapion. De esta segunda unión nacieron 15 hijos uno de ellos, su hija Marie Laveau siguió los pasos de su madre y se convirtió en reina del vudoo.
Es interesante notar que hasta la muerte de su primer esposo, Marie trabaja como peluquera en un pequeño salón de Nueva Orleans y que al parecer su negocio adelantaba a pasos acelerados. Alrededor de éste período, comienza a interesarse por las artes ocultas y enfoca toda su atención a la práctica del Vodoo.
A Marie le gustaba decir que era la “Viuda Paris”. Entonces, abiertamente, comenzó a practicar el vudú y logró atraer a su grupo de influencia a muchas mujeres blancas y ricas de Nueva Orleáns, su poder y su fama crecieron. Su segundo esposo también murió en forma misteriosa.
En 1830 se le proclamó “Reina del Vudú en Nueva Orleáns”, y ejerció sus poderes hasta 1835 en que falleció, a los 66 años de edad. Sin embargo, otros registros oficiales de Nueva Orleans de defunciones, existe una Marie Glapion Laveau cuyo fallecimiento tuvo lugar el 15 de junio de 1881, a los 98 años de edad (aunque se cree que pudiera tratarse de otra persona).
Su tumba se encuentra en el cementerio de San Luis de Nueva Orleans, y es visitada por muchos fieles, siendo una de las grandes atracciones de la ciudad conjuntamente con el Museo Histórico del Vudú de Nueva Orleans.
Se cree que su interés nace de su profunda curiosidad por el misterio que encierra la muerte de la Reina del Vudú.
La muerte de un enemigo costaba, como mínimo, mil dólares. Mató a mucha gente y, según dicen, tenía el poder de maldecir a las personas hasta la cuarta generación.Entre otras cosas, se dice que hacía lo siguiente:
* Invocaba a los espíritus de los muertos.
* Hacía caer los cuadros de las paredes simplemente con mirarlos.
* Causó muchas desgracias entre las familias.
* Escribía el nombre de la víctima en un globo, amarraba en el cordel una imagen de san Expedito y soltaba el globo en el aire. El infeliz cuyo nombre estaba escrito allí, se desvanecía en la misma dirección que la del globo, llevado por el viento. ¿Sería cierto?
* Era especialista en ganar procesos judiciales, haciendo con los nombres de los jurados, del promotor y del juez, lo siguiente: ponía sus nombres en un pedazo de papel, los colocaba dentro de un bloque de hielo y los cubría con azúcar, Encendía nueve velas alrededor del bloque de hielo, golpeaba nueve veces en el suelo recitando oraciones en una lengua desconocida. En casos más difíciles apelaba a otros objetos tales como velas negras, o a animales tales como sapos, lagartos, cobras u otros, hasta alcanzar victoria.
* Hacía bolas de cera con pedazos de carne (de preferencia humana) y las traspasaba con alfileres o los marcaba con sangre. Esas bolitas podían causar la muerte o cualquier efecto deseado.
Fuente consultada: wiccareencarnada.