El cruel destino a veces nos juega malas pasadas y tal vez ese “gran rey del terror” que vendrá del cielo y provocará el caos en la Tierra no esté tan encriptado como todos creen que nos dejó sentenciado el ya célebre Michel de Nostradame. Actualmente uno de los mayores y más ignorados peligros que amenaza a la Tierra, junto con el propio egoismo, vanidad y capacidad de destrucción humana, proviene del cielo, de fuera de nuestro planeta azul…
Viajeros espaciales incansables en un infatigable camino por el Universo infinito, esos viajeros son los asteroides, errantes masas rocosas de mayor o menor tamaño que en cualquiera de los casos suponen un peligro potencial en caso de impacto directo con nuestro planeta. Muchos científicos los califican como “los peligros del siglo XXI” y no les falta razón, muchos ya nos han pasado relativamente cerca como el famoso “Toutatis”.
El 1997XF11 dio el susto en 1998, con un diámetro de apenas 2 kilómetros no fue advertido hasta que se encontraba muy cerca de la Tierra, en un principio se calculó que podría impactar el 26 de Octubre de 2028, según cálculos de recreación informática, los valores fueron retomados y rectificados y el nuevo cálculo arrojo un valor más prometedor, pasaría a 1.150.000 kms…
Se respiró con alivio pero los científicos advirtieron: “la posibilidad de choque aún no está descartada…” El “Apophis” amenaza nuestro planeta para el 2019…
Las consecuencias de un choque entre nuestro planeta y un asteroide de estas características sería fatal… La potencia que liberaría sería el equivalente a dos millones de bombas atómicas como las detonadas durante la IIª. Guerra Mundial.
El asteroide Apophis pasará cercano a la Tierra en el 2029 y la colisión no está descartada, así lo manifestó Alberto Celino, del Observatorio de Turín (Italia).

El científico dijo: “Podemos descartar una colisión en el próximo acercamiento más cercano con la Tierra, pero entonces la órbita cambiará de una manera que no es totalmente predecible en este momento, por lo que no podemos predecir el comportamiento en una escala de tiempo más larga”, teniendo en cuenta que la estimación es que pasará a sólo 30.000 kilómetros de nuestro planeta y no se sabe cómo le afectará la gravedad. Un impacto con el Apophis puede acabar con la vida en la Tierra“.
Alan Harris, investigador del Jet Propulsion Laboratory (JET), informó: “No hay asteroides conocidos en un cierto curso de colisión. Pero como las órbitas son conocidas imperfectamente, hay algunas que tienen una baja probabilidad de impacto en un futuro lejano, pero en la actualidad ninguno de los asteroides conocidos tiene una probabilidad de impacto que exceda la posibilidad de que un asteroide no descubierto del mismo tamaño golpee la Tierra en algún momento entre ahora y la posible fecha de impacto del objeto imperfectamente conocido”.
El científico añadió: “Apophis tiene una calificación en la escala de Palermo de alrededor de menos tres, por lo que aunque no podemos descartar un impacto en el futuro, es aproximadamente mil veces menos probable que un impacto al azar en el mismo intervalo de tiempo. Debido a un cierre, pero no impactante, paso por la Tierra, existen numerosas trayectorias de impacto posibles más allá de eso, pero todas son de muy baja probabilidad”.
El asteroide Apophis tiene 370 metros de diámetro y el impacto se calcula en 2029 en caso de producirse.
Muchas son las investigaciones que se están realizando, por diferentes observatorios y universidades, sobre un posible impacto de un meteorito contra la Tierra, el asteroide del “Juicio Final”, aquel que ejecutará el tan temido Apocalipsis.
Pese a que se sabe que en el Universo hay miles de fragmentos de roca, de muy diferentes tamaños, la caída sobre nuestro planeta de uno superior a un kilómetro podría suponer un auténtico fin del mundo, similar al que acabó con los dinosaurios hace 65 millones de años en la zona de Yucatán, de hecho hay modelos informáticos que recrean toda la acción de cómo serían los últimos instantes en nuestro planeta.
Ha sido un grupo de científicos los que se han centrado en estudiar el impacto del asteroide 1950 DA, un impacto provocaría cataclismos en la Tierra de considerables proporciones. La explosión inicial sería equivalente a 44,8 millones de megatones de una bomba atómica, el equivalente a 2,5 millones de veces la potencia de la explosión atómica que destruyó la ciudad de Hiroshima.
El asteroide 1950 DA viaja a 54.000 kilómetros por hora, 15 kilómetros por segundo, y se dirige en rumbo de colisión contra la Tierra. El impacto se producirá el 16 de marzo de 2880 aunque se espera que cambie de trayectoria.
Cada vez la Ciencia avanza más para desvelar los muchos secretos que tiene nuestro Universo y los peligros que nos acechan. Uno de los más temidos -y de los que más se ha llevado al cine- es la posible caída sobre la Tierra de un meteorito apocalíptico. Quizás, debido a ello, la NASA ha redoblado sus esfuerzos y con la misión NEOWISE se trata de etiquetar asteroides potencialmente peligrosos.